El Tesoro del Carambolo

El Tesoro del Carambolo es un fascinante descubrimiento arqueológico que ha captado la atención de historiadores y arqueólogos. Descubierta en 1958 por Juan de Mata Carriazo durante las obras de construcción del cerro del Carambolo, en Camas. Esta colección de oro y cerámica ha suscitado mucho debate y controversia sobre su origen y finalidad. Con 21 piezas de intrincadas joyas de oro expuestas en el Museo Arqueológico de Sevilla, entre ellas un impresionante collar y espléndidos brazaletes, el Tesoro del Carambolo es un testimonio de la excepcional habilidad de los orfebres que las crearon. Acompáñanos mientras exploramos la historia y el misterio que se esconden tras este increíble hallazgo.

Tesoro del Carambolo en el Museo Arqueológico de Sevilla

Debido a la gran importancia histórica y cultural del tesoro, la Junta de Andalucía decidió crear réplicas exactas para su exhibición en el Museo Arqueológico de Sevilla, encontrándose el original en una caja fuerte de un banco. La réplica exacta se encuentra en una sala monográfica en la primera planta del Museo Arqueológico de Sevilla.

VIDEO EL TESORO DEL CARAMBOLO

Museo Arqueológico de Sevilla

Dirección: Plaza de América, Parque de María Luisa. Sevilla
Teléfono: 954 786 474

Descubrimiento del Tesoro de El Carambolo

El tesoro de El Carambolo es uno de los hallazgos más significativos de la arqueología en España. En los cerros de la Meseta de Aljarafe en Sevilla, conocidos como «carambolos», se encontró un tesoro arqueológico de incalculable valor en 1958, mientras se llevaban a cabo unas obras de ampliación de un edificio de la Real Sociedad de Tiro de Pichón de Sevilla. El tesoro fue descubierto por casualidad por el albañil Alonso Hinojos del Pino, quien excavaba unos centímetros más profundo para cumplir con una petición del arquitecto. Encontró un brazalete de oro de 24 quilates y más abajo, un recipiente de barro cocido con el resto del tesoro, incluyendo 20 piezas de oro más de 24 quilates.

La Real Sociedad de Tiro de Pichón, responsable de las obras pidió ayuda a un experto en arqueología, el profesor Juan de Mata Carriazo y Arroquia, arqueólogo y catedrático de Prehistoria e Historia de España Antigua y Medieval en la Universidad de Sevilla, quien tras estudiar detalladamente las piezas, llegó a la conclusión de que eran de origen tartésico y dató su antigüedad entre el siglo VII a.C y el siglo III a.C.

El Tesoro está formado por 21 piezas de oro de 24 quilates, y en total pesan casi tres kilos de oro. Entre las piezas se encuentran un collar con dos ramas de cadenas, dos brazaletes cilíndricos prácticamente idénticos, dos pectorales en forma de equis con la misma decoración que los brazaletes, 16 placas idéntica decoración que los brazaletes. Según expertos en joyería y orfebrería, la creación de todas las piezas del tesoro requería al menos cinco años de trabajo. Esto sugiere que una obra de tal magnitud se realizaba por encargo o por motivos religiosos.

Tartessos, la primera cultura del Mediterráneo occidental

Tartesos es una cultura que ha generado mucho interés en la arqueología española debido a su antigüedad y a la falta de información fiable sobre su historia. Se cree que Tartessos prosperó en el sur de España entre los siglos IX y VI a.C. y que fue una cultura rica y avanzada. Sin embargo, la riqueza de los tartesios y su aparente «desaparición» hace unos 2500 años han dado pie a teorías que los equiparan con el lugar mítico de la Atlántida.

Dicha civilización también ha sido objeto de múltiples teorías que la relacionan con el Antiguo Egipto, los fenicios o los griegos. No obstante, la arqueología ha demostrado que Tartessos fue una cultura autóctona que se originó a partir de los primeros contactos con la población oriental, principalmente fenicios, que fundaron sus colonias occidentales a finales del siglo IX a.C.

Tartessos en la península Ibérica

Lo interesante de esta cultura es que representa una simbiosis entre lo oriental, mediterráneo, y lo local, de raíz atlántica.¡Es fascinante cómo diferentes culturas y tradiciones pueden mezclarse y dar lugar a algo nuevo y único! En definitiva, Tartessos es una muestra de la diversidad cultural y la capacidad de adaptación que ha existido desde la antigüedad en la Península Ibérica.

Origen del Tesoro del Carambolo

El tesoro de El Carambolo es una colección de 21 piezas de oro que incluyen un collar con medallones con grabados intrincados, varios adornos para el pecho en forma de piel de buey y pulseras. Los arqueólogos creen que el tesoro fue enterrado deliberadamente en el siglo VI a.C., aunque la mayoría de las piezas se fabricaron dos siglos antes.

Durante muchos años se creyó que el tesoro era de origen tartessico, pero las excavaciones recientes han llevado a otras hipótesis. Los especialistas ahora creen que se trata de un santuario fenicio dedicado a la diosa Astarté y que el tesoro fue creado por artesanos fenicios. También se cree que las piezas podrían haber sido utilizadas como adorno para algún animal en un ritual de sacrificio en el templo de Astarté. Aunque aún hay muchas preguntas sin respuesta, lo que está claro es que el tesoro del Carambolo sigue siendo un misterio fascinante para los arqueólogos y el público en general.

El orígen del Tesoro de El Carambolo ha sido objeto de controversia entre los arqueólogos durante mucho tiempo. Para resolver este debate se llevaron a cabo análisis químicos e isotópicos en pequeños fragmentos de oro y el análisis reveló que el oro probablemente procedía de las mismas minas de los dólmenes de Valencina de la Concepción, que datan del 3000 a.C. y que también se encuentran cerca de Sevilla.

Información y visitas del Museo Arqueológico de Sevilla

La réplica de El Tesoro del Carambolo se encuentra en una sala monográfica en la primera planta del Museo Arqueológico de Sevilla. Este museo tiene sus orígenes en el siglo XIX con una colección pública de antigüedades, la mayoría de ellas extraídas de la ciudad romana de Itálica. No fue hasta mediados del siglo siguiente que se trasladó al pabellón de Bellas Artes creado por Aníbal González para la Exposición Iberoamericana de 1929, cedido por el Ayuntamiento de Sevilla. El museo consta de tres plantas y cuenta con colecciones de prehistoria, protohistoria, época romana, antigüedad tardía, edad media y moderna.

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